Santiago Solari, entrenador argentino del Real Madrid, mostró sentimientos encontrados por la designación del estadio Santiago Bernabéu como sede de la final de la Copa Libertadores entre River Plate y Boca Juniors, el 9 de diciembre.
La violencia en la vuelta de la final en el Monumental derivó en idas y venidas de la Conmebol para encontrar una solución. Para Alejandro Domínguez, la acertada es jugar en la capital española.
“Lamentablemente para mí, ha perdido trascendencia este partido. En mi corazón, a eso me refiero. Es una pena decirlo, pero es la realidad. Ojalá que la final en el Bernabéu sirva para limpiar lo que pasó, limpiarlo no, pero para darle un cierre digno de semejante partido y que gane el mejor”, afirmó Solari.
El resto de las frases del argentino:
“(Por la decisión de jugar en Madrid) tengo sensaciones encontradas. Por un lado, es un honor para el madridismo, para nuestro estadio, recibir la final de la Copa Libertadores y el clásico del fútbol argentino”.
“Por el otro lado, no puedo dejar de aludir a las causas que traen este partido aquí, y que se tenga que jugar a un océano de distancia de Buenos Aires, y que ha roto muchos corazones lo que sucedió. Es una verdadera lástima”.
“Seamos optimistas: ojalá que el cierre esté a la altura del partido. Ya no lo estuvo allí. (Ojalá que) aquí con la historia de nuestro propio estadio, de todo lo que significa, ayude a ser huéspedes de esta final a limpiar el nombre de esta final, que es muy difícil ya a esta altura”.
“Pero si hay algo que pueda hacerlo es el nombre de nuestra institución y de nuestro estadio. También esperemos que la gente que se traslade o que esté aquí esté a la altura de las circunstancias”.
