Rubén Deicas, el vocalista que hizo llorar de emoción a la hinchada de Colón
La final de la Copa Sudamericana de 2019 tiene un extraño ingrediente de esos que le dan particularidad al fútbol. La primera final a partido único del torneo, que enfrentó a Independiente del Valle de Ecuador con el argentino Colón de Santa Fe no es recordada por goles o por alguna jugada.
El espectáculo ocurrió incluso antes del partido. El mítico grupo santafesino de cumbia, “Los Palmeras” empezaba su rutina con un himno de discotecas, el “Bombón Asesino”. Las más de cuarenta mil almas que viajaron a Asunción a apoyar al de negro y rojo la entonaron, como parte propia de la fiesta que venía.
Pero, al detenerse los tropicales acordes que hablan de esa mujer imaginaria, ese “bombón insaciable” (y que a pesar del tono fiestero, arrancó lágrimas en la grada), vino la verdadera descarga de sentimientos.
“A ver la gente de Colón”, fue el grito de Rubén “Cacho” Deicas. Al escucharse las primeras notas, a la feligresía sabalera se le erizó la piel y cuando se pronunciaron las primeras estrofas, no de “El Parrandero”, la canción original, sino esta versión de cancha, que arranca con “No hace falta que les diga que soy raza…” el alegre llanto de la hinchada de un equipo que estaba en un momento irrepetible de gloria, se desbordó.
El director de cámaras de la transmisión oficial fue hábil. Atrapó, para 128 países, a los hinchas forzando la garganta a más no poder, llorando de emoción porque se sentían en el cielo negro y rojo. Y con todo el sentimiento retumbo: “Aaaaee eaaaa yo soy sabalero”.
El clip le dio la vuelta al mundo en segundos. Se cantó en varios idiomas y otros equipos de fútbol querían la pegajosa melodía para ellos.
Por estos días, a un año de esa explosión de emociones, aunque el ganador fue Independiente del Valle, se recuerda con cariño a Colón. Su gente, a los sabaleros. Se rompió aquel dicho que dice que del segundo no se acuerda nadie.
Y ese personaje que con su potente voz, llena de emociones, emocionó a todo el planeta fútbol nos concedió una entrevista para Idioma Fútbol, a un año de que su imagen y su banda, Los Palmeras, le dieran la vuelta al planeta.
La alegría de Rubén Deicas
“Fue un momento glorioso para la institución de Colón, llegar a una fiesta enorme con 40 mil personas que salieron de Santa Fe y Paraguay nos recibió de la mejor manera. Ojalá se repita todo esto algún día”, fueron los primeros recuerdos de Rubén Deicas.
“Cacho”, nacido en 1953, en 1978 se unió al Sexteto Palmeras, una banda creada en 1972. A partir de entonces, ha sido su frontman y desde entonces la banda ha llegado a niveles de popularidad incuestionables.
“Fue un honor que Conmebol se haya fijado en un conjunto de Santa Fe. También tocamos con un conjunto de Ecuador (La Vagancia) y fue una fiesta enorme que quedara enganchada en el corazón de Colón”, agrega Deicas.
“El Sabalero”, pudiera parecer la versión de un tema anterior de la banda, “Soy Parrandero” que vio luz en 1995.
Otra vez, otra vez
La culpa de todo la tuvo el vino
¿Qué pasó? ¿qué pasó?
Que yo he nacido negro y parrandero
Aeea yo soy parrandero
Aeea parrandero, parrandero
Las pegajosas notas no fueron tomadas por el fútbol y cambiadas por el sentimiento del hincha como suele suceder en Argentina. “La canción tiene un significativo muy especial la canción original era “El Sabalero”, la habíamos reversionado como “(Soy) Parrandero”, pero como se habían grabado unos cuantos temas, preferimos dejarlo (la original) para otra oportunidad. Sin embargo, se dio la ocasión para la Sudamericana y tuvimos la fortuna que su autor, Óscar Arturo Pérez pudiera reversionar la canción y así dejar “El Sabalero” que recorrió el mundo”, contó “Cacho”.
“Sabalero”, un apodo de origen incierto, pero que tiene, con seguridad, relación con el sábalo, pez que abunda en el Río Salado, que atraviesa Santa Fe.
“Uno viene abrazando estos colores desde muy joven siempre al lado de la gente de Colón, la mayoría de los integrantes de Los Palmeras son colonistas. Son 30 o 40 años de ligados a los colores el rojo y negro y está fue una oportunidad para demostrarlo”, agregó el vocalista, quien en otros años grabó marchas y canticos para la institución.
A un año de ese momento, Deicas miró por el retrovisor y no pudo evitar sentir nostalgia: “Lo que siento a un año de esto es mucha emoción. Ya se empezó en Santa fe a recordar esos momentos que se pasaron por todos los canales de TV, de cable y abiertos. Lo que fue esa fiesta en Paraguay trajo una nostalgia terrible, se nos caen unas lágrimas. Y está bien que se haga recordar él esfuerzo de los hinchas para viajar a Paraguay a estar con su equipo”.