Con 18 años, Justin Kluivert hizo su debut con Holanda. Su padre, Patrick, lo hizo a la misma edad, en 1994. Pero el pequeño parece contar con mayor calidad para deslumbrar. El futuro luce brillante.
Nacido en Amsterdam el 5 de mayo de 1999, Justin creció bajo la sombra de su padre, figura con el Ajax y el Barcelona, entre otros clubes, a mediados de los 90 y principios de la década del 2000. En ese espejo se miró y con los ajacieds debutó en la campaña 2016-17, anotanro dos goles en 14 compromisos.
Su padre fue un delantero centro de larga zancada, resolutivo, que algunas veces entraba por las bandas. El joven es un extremo izquierdo desequlibrante, que también puede jugar por la derecha. Le pega a la pelota con los dos perfiles. Todo un huracán.
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— Foquintha (@Foquintha) March 20, 2018
Kluivert hijo tomó la alternativa gracias a Ronald Koeman. El técnico, vieja gloria del Ajax y el FC Barcelona, asumió las riendas del cuadro neerlandés, eliminado en su camino al Mundial de Rusia. Hizo debutar a Justin al minuto 78 en la victoria 3-0 sobre Portugal, este martes, ingresando como sustituto de Memphis Depay.
“Me siento muy feliz, he podido cumplir un sueño”, manifestó el pequeño Kluivert, tasado en los actuales momentos en casi 8 millones de euros.
A su padre le gustaría verlo vestido de blaugrana. “Claro que prefiero que vaya al Barcelona”, indicó en una entrevista reproducida por el diario Sport. “Pero en el fútbol todo puede ocurrir. Es adulto y debe tomar por sí mismo las decisiones. Pero él ya ha dicho que su sueño es jugar en el Barcelona”.
El seleccionador Koeman prefiere que vaya paso a paso. “Debe estar una temporada o más en Holanda, y luego dar el salto a la liga que prefiera”, indicó tras su estreno ante la Portugal de Cristiano Ronaldo.