Este miércoles ante Getafe, “Cholo” Simeone cumplirá 500 partidos como entrenador del Atlético de Madrid. Ha pasado mucho en estos 499 como cabeza de los colchoneros, desde que dejara Racing en Argentina para enrolarse en 2012 y debutar en un 0-0 con Málaga.
El Atlético de Madrid, en los años recientes al “Cholo” era un equipo golpeado y desalmado. Aún se sentía la vergüenza de haber descendido en el año 2000. La moral estaba realmente muy baja.
Simeone, que tiene entre ceja y ceja al Real Madrid y en cuanto a estilo, está en la acera contraria al Barcelona, hizo que este equipo gritara de nuevo que también es un grande de España y que puede poner a temblar al duopolio ibérico.
Después de que el Valencia ganara en la 2003-04, pasaron 15 años de hegemonía entre blancos y culés. Solo se opuso uno: el Atlético de Madrid del “Cholo”, que irrumpió en la 2013-14 para cambiar un poco los colores dominantes.
Aparte de esa preciosa Liga, añadió una Copa del Rey, una Supercopa doméstica, dos Europa League y dos Supercopa UEFA. Si bien, en la Europa League, Sevilla alza más copas, Simeone tiene un registro de 21 de los 28 partidos ganados (un 80,8%).
Su estilo: áspero y defensivo. Pragmático y efectivo. Cuenta la casa de estadísticas Opta un dato interesante: desde la temporada 12-13, Simeone tiene el equipo que más arcos en cero ha sacado en liga en Europa (172 en 317 duelos), seguido por el PSG (158 en 310). Esto le hace ser el mejor equipo con goles encajados, en el mismo período, con 0.68 dianas recibidas por juego.
En perspectiva, 260 juegos en 499 partidos se han saldado sin gol en contra. Tampoco es que golee mucho. Hay una tendencia del “uno-cerismo”, el 1-0, resultado que se ha repetido unas 86 veces según investigó el diario Olé.
Simeone ha sabido mutar. Es rara avis ver tanto tiempo a un DT en el mismo banquillo en Europa. Por sus manos han pasado Diego Costa, Radamel Falcao, Antoine Griezmann, Saúl y Koke, el único que se mantiene desde la primera vez.
“Cholo” le ha encontrado la garra a este equipo y con su visión del fútbol, le ha sacado partido para devolver la autoestima a una afición que estuvo 14 años sin poderle ganar a Real Madrid en el derbi de la ciudad. Y aunque perdió dos finales de Champions contra ellos (llegar a una final de Champions era impensado antes del “Cholo”), les ganó dos Supercopas: una de España y otra de Europa.
Pero llegó el argentino. Y todo cambió. Todo ha sido buen y los hinchas felices. No se avizora que se corte un ciclo que ha dado buenas tardes y momentos.
