El Manchester City goleó al Liverpool por una nueva jornada de la Premier League y se mantiene como el único perseguidor del Arsenal en la pelea por el título. El conjunto dirigido por Pep Guardiola fue ampliamente superior a su rival y uno de los jugadores más determinantes fue Julián Álvarez, quien fue titular ante la lesión de Erling Braut Haaland.
El delantero argentino firmó una actuación sensacional en cuanto a participación de cara al arco (anotó el gol del empate en el primer tiempo), pero brilló con luz propia a la hora de participar en el juego y donde demostró todas sus condiciones para formar parte del circuito de pases de su equipo.
Julián Álvarez, más que un delantero centro
Julián Álvarez jugó como centro delantero dentro del 3-2-2-3 con pelota del Manchester City, mismo rol de Erling Haaland pero aportando mucho más fuera del área. «No solo el gol, la asistencia en el segundo, en el tercero. Estuvo metido en todo. Con el balón, muy listo. Es un jugador excepcional. Juega en la selección de Argentina, la Campeones de la Copa del Mundo junto a Lionel Messi», afirmó Pep Guardiola después del encuentro.
Su encuentro fue un show de apoyos para jugar de espaldas con el fin de conectar con los mediocampistas de cara, desmarques para hacer daño a la espalda de la defensa del Liverpool y calidad técnica para asociarse con sus compañeros. El Manchester City fluyó mucho mejor con pelota con su presencia porque su movilidad generaba constantes superioridades para ir haciéndole daño al bloque defensivo de los de Jürgen Klopp. Más que un centro delantero, fue también un enlace para moverse entre líneas y conectarse con el resto de atacantes.
Pese a que tiene muy complicado ser titular ante la presencia de Haaland, Julián Álvarez demostró, en un gran escenario, que tiene condiciones para ser determinante y apoyar a su equipo en diferentes facetas del juego. Pep Guardiola no extraña al noruego ante la presencia del argentino.
