La batalla por la Champions League termina este sábado. Real Madrid y Liverpool decidirán al campeón, en el estadio Olímpico de Kiev.
Los merengues buscan su tercera copa consecutiva, para llegar a 13 en su historia; mientras que los ingleses aspiran a levantar su sexto trofeo.
En los papeles, Madrid surge como favorito, con Cristiano Ronaldo como principal arma, con 15 goles anotados en la actual edición.
Pero Zidane se quita el traje.
“No es así. Pueden decir muchas cosas, pero sabemos que no es así”, indicó el francés, en la rueda de prensa de este viernes. “No somos favoritos, ni Liverpool tampoco lo es. Es un 50-50, como siempre en las finales. Tenemos que hacer un gran partido para ganar. Dentro del vestuario no nos sentimos favoritos de nada”.
“Hemos llegado aquí con mucho trabajo, mucho talento, seguro, pero mucho trabajo. Llegar a una final no es nada fácil. Me siento contento de jugar otra vez una final”, recalcó el marsellés, guía de los merengues en las victorias en Milán y Cardiff.
Mientras, Liverpool apela a los goles de Mohamed Salah, Roberto Firmino y Sadio Mané. Los ingleses, que disputaron la fase previa, tienen al egipcio (11 tantos), el brasileño (11) y el senegalés (9) como sus puntales.
“Estoy seguro que los segundo antes del partido, Real Madrid estará más confiado que nosotros, pero nunca han jugado contra nosotros”, consideró el técnico alemán Jürgen Klopp. “Somos el Liverpool. Este club tiene en su ADN que siempre luchamos por grandes cosas, porque somos el Liverpool”.
“La experiencia que tienen es una gran ventaja, es 100% así, pero en un partido la experiencia no ayuda siempre”, juzgó el alemán. “Tenemos que ponerles todas las dificultades posibles. No podemos luchar a su nivel, pero las tácticas están ahí en fútbol para poner a tu nivel un equipo que es mejor. Es duro conseguirlo, pero debemos intentarlo”.
La última final entre ambos clubes ocurrió en 1981: ganaron los ingleses 1-0, con gol de Alan Kennedy.