El FC Barcelona derrotó 0-4 al Real Madrid para sorpresa de todos. La noche en el estadio Santiago Bernabéu fue un golpe de realidad para los dos equipos que disputaron una nueva edición del Clásico español.
El Real Madrid revivió los fantasmas de la eliminatoria ante el PSG por la UEFA Champions League, donde los últimos 30 minutos sirvieron como bomba de humo para esconder lo que ocurrió durante la gran mayoría de los partidos. Un equipo con muchas dudas a nivel colectivo y que depende de su equipo titular a un nivel muy alto para competir en los grandes escenarios.
Por otro lado, el conjunto azulgrana demostró que está en un proceso de crecimiento importante. Todavía lejos de los grandes equipos europeos, el conjunto azulgrana demostró en un gran escenario que es capaz de imponer su juego. El resultado no es casualidad, es causalidad por el flojo rendimiento del conjunto de Carlo Ancelotti y el gran momento del equipo de Xavi Hernández. Una noche que puede –y tiene- que significar un punto de inflexión.
Es momento de poner la lupa en el partido y analizar las claves que decantaron la balanza al lado visitante. Un repaso colectivo e individual en todos los sentidos, con Xavi ganando su primer gran partido en el banquillo del club.
Las claves de la victoria del FC Barcelona en el Clásico español
La desorganización defensiva del Real Madrid
Carlo Ancelotti apostó por Federico Valverde como reemplazante de Karim Benzema y reorganizó al colectivo con Luka Modric como falso 9 con para formar un 4-3-3 con pelota y un 4-2-4 sin ella, con uno de los interiores (Valverde o Toni Kroos) apoyando al croata para presionar a los centrales.
Los principales problemas ocurrieron cuando buscaron presionar arriba, donde no consiguieron neutralizar el inicio de la jugada de su rival. Gerard Piqué y Eric García tuvieron una noche sensacional a la hora de conectar con sus compañeros por detrás de la línea de presión del rival. “He intentado de apretar arriba y no ha salido, mi culpa”, afirmó el entrenador italiano en la rueda de prensa post partido.
Ancelotti intervino dándole la indicación a los centrales de ir por los interiores en caso de que estuvieran libres y reajustando el bloque para que los volantes del Barcelona no recibieran solos. Y en ese momento es en el que Marc André Ter Stegen fue clave para romper la presión alta: Efectividad total para conectar en corto y en largo con los costados para que los laterales recibirán con ventajas. Un reajuste que terminó de hundir al Real Madrid.
Sergio Busquets en la zona libre
El mediocentro blaugrana fue uno de los mejores del partido y es que, ante la presión desorganizada del conjunto merengue, fue el que recibió con ventajas en varias ocasiones por detrás de la primera línea defensiva rival con lo que facilitó que su equipo se posicionara en campo rival con los interiores fijando (pero con libertad para descender e intervenir en la base) a los mediocentros rivales.
El Barcelona interpretó muy bien cada salto defensivo individual del rival y Xavi lo confirmó en rueda de prensa. «Hemos buscado la espalda de los interiores, hemos entendido quién saltaba. Luego hemos visto que Alaba saltaba a Frenkie de Jong y buscábamos el 1c1. Era un partido de valentía, personalidad, de no perder balones tontas. Hemos tenido el partido muy controlado, con gran presión alta».
Los interiores (Frenkie de Jong y Pedri) fueron claves a partir de su movilidad, siendo más agresivos que en partidos anteriores y cerca de los externos (lateral y extremo) para generar los triángulos para tener superioridad en la zona.
El plan sin pelota del Barcelona
El FC Barcelona no renunció a su presión alta y presión tras perdida para recuperar la pelota lo más rápido posible. Y, ante un rival con pocas ideas y sin su principal referencia ofensiva en todos los sentidos, dominaron todo el partido entre el 0-0 hasta el 0-4.
La posición de Ronald Araújo como lateral derecho para frenar a Vinícius Junior (un recurso antes utilizado por Xavi) fue clave para contener las transiciones rivales y contener a su principal pieza en el ataque. El uruguayo es el mejor de los defensores blaugranas defendiendo a campo abierto, por lo que el entrenador se decantó por él por encima de Dani Alves, quien sufrió mucho ante su compatriota en el partido de la Supercopa española.
Otro rasgo a destacar fue la capacidad del bloque para reorganizarse tras presión para armar un bloque corte donde neutralizó el juego entre líneas rival y forzándolos a jugar en largo para encontrar espacios, pero la última línea se comportó de manera sensacional en la gran parte del encuentro.
Extremos contra laterales
Xavi planteó un juego donde sus extremos (Ferran Torres y Ousmane Dembélé) recibieran con ventajas para que encararan a los laterales rivales (Dani Carvajal y Nacho Fernández) y ganar en los 1vs1. Ambos eran los puntos débiles del Real Madrid, que nunca pudo contener dichos escenarios a nivel colectivo. Los centrales se vieron forzados a salir para condicionar. El Barcelona se impuso a su rival con sus extremos haciendo mucho daño en los costados, tanto desbordando como combinándose fijando en banda.
- Ferran Torres: 1 gol y 1 asistencia
- Ousmane Dembélé: 2 asistencias
La intervención de Carlo Ancelotti
El italiano corrigió al final del primer tiempo para reorganizar a su equipo colocando a los futbolistas en su posición natural pero con Valverde en banda derecha y Rodrygo en punta.
Ante el 0-2 en la primera mitad, el entrenador italiano decidió mover el árbol para intentar acomodar a su equipo en el medio tiempo, dominar el desarrollo y buscar igualar el marcador. Y no solo no ocurrió, es que el equipo empeoró y el mismo Courtois lo confirmó post partido. “Tras el descanso creemos que podemos remontar el partido y a los diez segundos estaba solo Ferran contra mí…De la táctica tenemos que hablar internamente. No ha salido ni lo del inicio ni lo del segundo tiempo… hay que discutirlo internamente, no aquí”
Ancelotti les dio ingreso en el medio tiempo a Eduardo Camavinga (por Toni Kroos) y Mariano Díaz (por Dani Carvajal. Primero pasó a jugar con tres centrales para, solo segundos después (y un mano a mano fallado por Ferrán Torres), volver a la línea de cuatro con Casemiro de central y el francés de mediocentro. El desconcierto fue tan grande que, con solo 6 minutos de partido, el resultado pasó de 0-2 a 0-4.
La dirección de campo del entrenador merengue fue terrible. El resultado pudo ser peor, mucho peor. Después consiguió corregir con un sistema más reconocible para sus piezas y contener a su contrincante.
Pierre Emerick Aubameyng, MVP
El gabonés fue el mejor jugador del partido. 2 goles y una asistencia, pero con un impacto muy importante en el juego. Moviéndose con soltura, atacando zona entre líneas, liberando zonas, generando ventajas con sus apoyos y siendo terminante en el último tramo de la cancha. Es el delantero que está siendo la pieza que redondea la idea de juego de Xavi Hernández. Una exhibición en uno de los partidos más importantes que ha jugado en su carrera.
