
Alemania es una de las favoritas para ganar la Copa del Mundo de Qatar 2022 o, por lo menos, tiene todas las condiciones para hacerlo desde la llegada de Hans Dieter Flick al banquillo para relevar a Joachim Löw. Un entrenador que sabe lo que es ganar la UEFA Champions League y que, después de un paso más que positivo en el Bayern Múnich, está preparado para liderar a una nueva generación a levantar el título más importante en el mundo del fútbol.
Pese a que todavía falta mucho para la cita mundialista, es momento de ponerle la lupa a algunos de los aspectos tácticos que están utilizando las diferentes selecciones que buscarán levantar el título y llevar a su país. Y comenzaremos con la Alemania de Hans-Dieter Flick, utilizando el partido amistoso ante Israel para ver algunos detalles de su manera de jugar.
La Alemania de Hans Dieter Flick
3 centrales en inicio de la jugada
Pese a utilizar el 4-2-3-1 como sistema táctico principal, el equipo mutaba con la pelota en los pies. Uno de los movimientos más comunes era la presencia de David Raum (lateral izquierdo) en zonas ofensivas con Thilo Kehrer (lateral derecho) como tercer central o lateral bajo para apoyar en salida a Jonathan Tah y Nico Schlotterbeck (centrales). Dicha estructura facilita la salida desde el fondo, colocando al Julian Weigl (mediocentro) por delante de la primera línea de presión), y a tener una base más sólida ante la pérdida.
Dentro de la misma estructura, vemos a uno de los mediocentros (Gündogan) alternando alturas de manera constante. Aparece tanto entre líneas como en la base de la jugada para apoyar a su compañero de posición.
Los cambios de frente para activar al alejado
Los cambios de frente son claves dentro de la circulación de la pelota alemana. Siempre buscan activar al más alejado, después de juntar al rival en el costado fuerte, para que pueda recibir con ventajas y atacar a la última línea o para atacar la espalda de la defensa rival. En un ritmo de circulación alto de pelota, es necesario cambiar la orientación del ataque para ir encontrando espacios en el bloque defensivo rival cuando está basculando.
Por otro lado, y con el bloque defensivo dejando espacio a sus espaldas, Alemania apostó por los pases profundos para los movimientos de sus atacantes. Desmarques constantes.
Movilidad de los atacantes
Los atacantes se mantienen en constante movimiento, menos el extremo derecho (fija en banda ante el lateral bajo). El delantero centro junto al mediapunta y al “extremo izquierdo” intercambian roles de manera constante para activar el juego entre líneas y atacar la última línea con desmarques en profundidad. Contar con atacantes como Kai Havertz, Thomas Müller, Timo Werner y Jamal Musiala facilita tener un flanco ofensivo con constantes movimientos e intercambios de roles.
Sin pelota
Los alemanes se organizan en un bloque en 4-4-2 con líneas muy juntas en cada altura que ocupan. Realizan una presión alta en reinicios e inicios de la jugada rival para recuperar la pelota lo más pronto posible, adaptándose a la manera de atacar del contrincante tanto a nivel de altura como de estructura. Es un equipo que siempre quiere tener el protagonismo del juego.